Las sociedades de caza se muestran impotentes ante el acoso que sufren por parte de descontrolados que sabotean su actividad. La última agresión que ha trascendido ha sido el destrozo de tres puestos de la línea Ianci-Aldura, situados en el parque natural de Aiako Harria. El delegado de caza de la sociedad San Huberto de Errenteria, Adolfo Olivera, explica que su agrupación solicitó a primeros de diciembre una prórroga de caza en las líneas hasta el 9 de diciembre.
Cuando se dirigieron a repasar las zonas que gestionan se encontraron con tres puestos destrozados. ???No es la primera vez que ocurre. Al principio les echábamos la culpa a las vacas pero ahora ya no hay, sólo pastan ovejas???, señala Olivera.
El hecho también de que las casetas hayan quedado hechas añicos les lleva a pensar que se trata de ???intolerantes que se autodenominan ecologistas???. En opinión de los cazadores, lo más probable es que se trate de ???urbanitas que piensan que saben algo de la naturaleza y no tienen ni idea???.
La prueba, dice Olivera, es que acusan a los cazadores de eliminar la fauna autóctona cuando ???toda la caza que abatimos es de pase??? y, en cuanto a la caza mayor, subraya que si los cazadores no eliminaran ejemplares de jabalí y corzo los baserritarras perderían todas sus cosechas. ???No hay más que ver lo graves destrozos que se produjeron en la zona de Tolosaldea y el Bajo Deba al principio de la temporada???.
El incidente de los puestos no es el único que han soportado los miembros de la sociedad San Huberto. En otra línea, la de Papin, en Pasai Antxo, ???continuamente hay puestos en el suelo???. Por otra parte, los sacos que suelen colocar a pie de las casetas para recoger los cartuchos y llevarlos al contenedor correspondiente aparecieron recientemente vacíos y su contenido desperdigado por la carretera. ???Como si la Ertzaintza, la Policía Municipal o el guarderío fueran a pensar que hemos sido nosotros???, ironiza Olivera. Los cazadores tuvieron que recoger los desechos ???como pudimos??? para llevarlos al contenedor amarillo.
Al tratarse de hechos que se repiten durante toda la temporada, los cazadores han instado a los guardas forestales y a la Diputación, como propietaria que es de los puestos, a extremar la vigilancia. ???El guarda nos dice que aunque les vea no les puede decir nada. ¿Qué pasa, que sólo están para controlar a los cazadores????, protesta el delegado de San Huberto. La Diputación delega la gestión de casi todas las líneas en la federación y ésta en las sociedades, por lo que la responsabilidad se acaba diluyendo.
RUEDAS PINCHADAS. La Ertzaintza les recomienda perseguir a los infractores y tomar su número de matrícula. ???Nos dice que si los vemos no nos metamos con ellos porque son capaces de denunciarnos diciendo que los hemos amenazado con la escopeta???. La solución, pues, no es sencilla. Olivera se resigna a esperar a que ???el guarderío controle a esa gente???.
A lo largo de la temporada se han producido sabotajes también en otros puntos. Al delegado de caza de San Huberto le consta que se han derribado puestos en Irún, en las líneas que gestiona la sociedad Bidasoa dentro asimismo del parque de Aiako Harria.
En octubre, un cazador eibarrés informaba de que se habían cerrado algunos puestos y se habían derribado otros en la zona de Itziar. Según aseguraba, las sociedades no se mostraron dispuestas a levantarlos y la Diputación se inhibió, por lo que este año no se ha cazado en esos puntos. Este aficionado lamentaba la falta de implicación de la federación en este problema. Por último, un aficionado más ha tenido que soportar que desconocidos pincharan las ruedas de su coche en San Marcos y le dejaran una notita donde le decían ???cazador, asesino, hijo de puta. Jódete???.
Es una vergüenza que ocurran este tipo de cosas, bien en Gipuzkoa o en cualquier sitio. Tendremos que empezar a utilizar trail cams para ver quiénes son los que llevan a cabo este tipo de actos, porque no creo que sea gente que alegremente va paseando por el monte, ve un puesto y se pone a romperlo, sino que serán gente organizada y con los materiales necesarios para hacer semejantes cosas.