EL tirador vizcaino de origen gallego Antonio Taboada volvió a brillar en los recorridos de caza, en este caso en el Campeonato de Bizkaia 2012, al imponerse de forma contundente en los seis puestos preparados el pasado sábado 21 de abril en las campas de Arkale, en Oiartzun, pertenecientes a la Federación Guipuzcoana de Caza. Toño Taboada fue capaz de romper 43 de los 50 platos lanzados en una mañana que aguantó sin llover hasta mediodía, pero que luego obsequió con chaparrones a la zona más oriental del territorio guipuzcoano.
En la clasificación le siguió otro clásico en estas pruebas, Alberto Azurmendi, con tres platos menos, uno más que otro histórico de la modalidad, Dionisio Garai, que totalizó 40 platos rotos. La cuarta plaza fue para otro tirador de la Kolina y que cada vez apunta menores maneras, Iñaki Ortiz, que empató a 39 platos con Goizeder Ayarza, un deriotarra que también mejora en cada competición. El sexto puesto registró un triple empate a 35 platos, que fueron los rotos por Iñaki Ibarretxe, Juan Sexto y Justo Aguinaga, que quedaron en este mismo orden de clasificación. El noveno puesto, por tanto, fue para Oskar Cuadrado, con 34, mientras que cerró la lista de los diez primeros Iñigo Ibarra, con 33, empatado con Jesús Ortiz, que quedó de reserva.
En el resto de categorías, en Veteranos se impuso Javier Ayarza, en Superveteranos Domingo de Miguel, en Junior Valentín Pinto y en Damas Mari Jose Pérez, quienes también acudirán representando a Bizkaia al Campeonato de Euskadi de la modalidad. Por cierto, que se celebrará en este mismo escenario guipuzcoano pero en una desafortunada fecha, el domingo 17 de junio, el mismo día en que Adecap celebrará en Dima el XX aniversario de su fiesta anual para cazadores y pescadores. Feo detalle de planificación por parte de la Federación Vasca de Caza, que quizá no disponga de otra fecha disponible para esta prueba, o casualidades de calendario, quién sabe.
Afición Ciertamente, tienen mérito todos los participantes vizcainos que madrugan y viajan más de cien kilómetros fuera de su territorio para disputar una prueba federativa propia. Pero es que la modalidad tiene mucho enganche para quienes les gusta tirar con escopeta. Las patenas, conejos, minis, superminis y normales ofrecen una variedad tal de trayectorias y posibilidades que hacen casi irrepetible cada puesto de competición. Los escenarios, en cualquier sitio imaginable en el monte, facilitan o complican juzgar la trayectoria y la distancia a la que vuelan los diversos platos.
Y además, en esta modalidad los platos se tiran todos seguidos en cada puesto, por lo que cada tirador debe conocer y afrontar muy rápidamente cada situación, cada plato, con la sana intención de romperlo. Por supuesto, no se puede encarar la escopeta hasta que no se vea volar al plato, por lo que se sale en guardia baja; esto es, con la culata de la escopeta pegada al cuerpo a la altura del estómago o la tripa, por lo que un encare rápido y acertado será fundamental para ganar unos instantes más para apuntar al plato.
Pero toda esta afición de una modalidad en auge, a nivel estatal e internacional, contrasta con la inexistencia de un solo campo estable de recorridos de caza estable en Euskadi. Solo hay su versión de pista en Oiartzun y en el coto alavés de Txoriarte, y el campo más cercano está por Soria. Se trata de una modalidad que requiere disciplina, aporta seguridad al cazador o tirador, tanto en el manejo correcto de la escopeta como en el cálculo de dónde impactará cada disparo, además de precisar en qué momento exacto se debe apretar el gatillo. Muchas ventajas para poder dar una salida deportiva a la escopeta, a la vez que educar en su uso más adecuado a los muchos miles de cazadores vascos, pero que sigue sin contar con alternativas.
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